Para los luminosos ojos verdes
en medio de la negritud de la noche
Afuera la lluvia viene con pies de plomo, relámpagos y vientos fuertes. Recuerdo a mi abuela y la historia que me contó cuando era pequeña, había una noche similar a ésta. Se acercó con una silla a mi lado y me confesó: "Preciosa, no tengas miedo, se escucha así porque del cielo están descendiendo ángeles"
-¿Ángeles? pero no los podemos ver- yo aseguraba incrédula
-Sí, ángeles que se convierten en algún animalito o persona y pasan la vida contigo protegiéndote de lo más despiadado que pueda dañarte. Cuando era niña, así como tú, mi papá me contó esta historia, pero yo tampoco le creía.
-¿Y ahora crees?
-¡Por supuesto! En noches de lluvia fuerte, cada relámpago es un ángel que cae del cielo, por eso se escucha así y tiene una luz que no te deja ver. Cuando los ángeles caen aún son luces y se tienen que convertir en algo o alguien para que nosotros los reconozcamos. Ellos nos buscan. Vienen a nosotros con la única misión de encontrarnos y vivir junto a nosotros.
-¿Y por qué? ¿De qué nos protegen?
-De nosotros mismos